La Inteligencia Artificial (IA) ha conquistado cada vez más espacios de nuestra vida, y aunque esto conlleva un reto generacional muy importante, como institución estamos seguros de que podemos ir al ritmo de los cambios; creemos en ti, en tus hijos y en el modelo educativo con el que enseñamos para un futuro con filosofía humanista.
Al margen de los avances científicos y tecnológicos, nuestro abordaje de la IA se centra en tres aspectos principales:
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Uso de herramientas de IA en el aula.
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Aprendizaje sobre las técnicas y tecnologías de la IA.
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Desarrollo de principios éticos y creación de una cultura sobre la aplicación de esta tecnología.
En la definición de Lasse P. Rouhiainen, especialista en IA y Blockchain, la IA es la capacidad que tiene la tecnología para llevar a cabo actividades que hasta hace tiempo requerían de la inteligencia humana.
La Inteligencia Artificial ha sido diseñada por medio de algoritmos que funcionan como una “mente” con pensamiento autónomo. Sin embargo, nuestra educación concibe la IA como una herramienta y no como un sustituto de las labores humanas.
Inteligencia artificial: ejemplos de sus beneficios
Los avances tecnológicos dentro de esta categoría, suponen muchas ventajas en el ámbito educativo, destacando los siguientes entre las más importantes:
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Ofrecer una experiencia en educación más personalizada.
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Generar la automatización de las tareas repetitivas de los docentes.
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Nuevas formas de interacción entre los estudiantes y las TIC.
Aplicaciones de esta tecnología en la educación
A continuación enlistamos algunos de los sistemas que resultan de esta tecnología:
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Plataformas de autoaprendizaje, robótica para la educación y chatbots.
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Herramientas como ToolboX, que permiten medir el rendimiento académico de los estudiantes.
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Herramientas diagnósticas para detectar dificultades en el aprendizaje.
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Sistemas como TestBench, diseñados para la evaluación remota.
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Asesorías académicas de forma virtual.
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Optimización de trámites administrativos.
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Diseño de material didáctico a través de la tecnología en la educación.
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Avances científicos y tecnológicos basados en IA: perspectivas actuales
De las aplicaciones de la Inteligencia artificial, ejemplos positivos sobran, pero ciertos temores persisten. Entre ellos, la creencia de que los estudiantes dejen de realizar sus tareas y escribir sus ensayos al disponer de herramientas como el ChatGPT, un software capaz de generar trabajos académicos originales acerca de cualquier tema.
No obstante, las perspectivas sobre el uso y las ventajas de los avances tecnológicos son alentadoras. Al respecto, la UNESCO considera que el uso de la Inteligencia Artificial permitirá enfrentar los principales desafíos de la educación mediante la innovación.
De ahí la decisión de este organismo de apoyar a los Estados Miembro, para que obtengan las mayores ventajas posibles de la tecnología para conseguir los objetivos de la Agenda de Educación 2030.
Con este propósito, el enfoque en el uso y la enseñanza de esta tecnología innovadora en las aulas, estará puesto en alcanzar una mayor igualdad. Se espera, además, que la Inteligencia Artificial mejore las capacidades, refuerce la protección a los derechos humanos y se emplee en proyectos de desarrollo sostenible.
Con la finalidad de que los estudiantes utilicen la Inteligencia Artificial como una herramienta para potenciar sus diferentes habilidades, sin dejar de lado su formación en valores, en Justo Sierra educamos a partir de una filosofía humanista, convencidos de que evolucionar con los cambios y ventajas de los avances tecnológicos es el camino hacia la Grandeza.
