Hoy en día existen muchas opciones para estudiar cualquier tipo de licenciatura, maestría o doctorado. Estudiar en línea es un método cada vez más popular y utilizado por diferentes instituciones.
Debido a la emergencia sanitaria por Covid-19 este modelo se ha vuelto aún más popular e incluso una necesidad debido a la imposibilidad de realizar clases presenciales temporalmente.
A raíz de esto, han surgido quienes se preguntan si el modelo en línea habrá llegado para quedarse ya que consideran que es un método más efectivo.
Pero, ¿Será factible realizar un doctorado en educación en línea?
Se utilizan plataformas digitales para impartir las clases por medio de videollamadas grupales en las que los estudiantes ingresan a la hora determinada de la clase y reciben la lección por parte de sus profesores.
Los maestros imparten sus clases a través de estas plataformas, a menudo comparten la pantalla de su computadora a los estudiantes para presentar diapositivas o procesos escritos. Este método es el nuevo pizarrón digital.
De igual manera se realizan exámenes y evaluaciones por medio de plataformas digitales para monitorear el avance y aprendizaje de los estudiantes.
Para muchos profesores esta clase de modelo es algo completamente nuevo, por lo que puede ser que no estén acostumbrados a utilizar estas plataformas o dispositivos digitales y le resulte difícil adaptar sus clases a este modelo.
Debido a esto, en algunos casos fallan en adaptar la clase y los alumnos no reciben la información completa o de la forma en la que deberían, ya que las plataformas digitales no alcanzan para cumplir el objetivo en su totalidad.
Por otro lado, algunos de los alumnos han encontrado dificultad en poder concentrarse efectivamente al momento de tomar sus clases, ya que al tomarlas de manera digital desde sus casas en ocasiones provoca que se distraigan con mayor facilidad o que no logren poner la debida atención al monitor.
Una desventaja que muchos alumnos encuentran con esta nueva modalidad virtual es que no saben administrar bien sus tiempos, pues tienen que dividirse entre miles de tareas en una rutina a la que no estamos acostumbrados. Por eso, te presentamos algunos tips para administrar mejor tu tiempo.
Esta regla de los dos minutos dice que si estás planificado una acción que se puede hacer en menos de dos minutos, hazla. Después puedes extender ese tiempo a 5 o 10 minutos. Por ejemplo, cuando comienzas a acomodar tus libros en el librero, después extiendes un poco más el tiempo y te pones a limpiarlos. Si haces de esta regla un buen hábito, habrá una multitud de tareas que las harás sencillamente.
Si hay una materia que no te gusta o que te da pereza, plantéate trabajar por 5 minutos. Cuando empiezas a trabajar estos sentimientos malos se desvanecen y agarras impulso para continuar y terminarlo. Al dar este primer paso vences toda resistencia y empiezas a ver de otra manera cosas que antes te parecían totalmente imposibles. Así es que deja de pensarlo y hazlo.
Las rutinas son hábitos o costumbres que hacer ya inconsciente y simplifican tu vida por lo que si conviertes las tareas repetitivas y aburridas en rutinas, terminarás haciéndolas sin ningún problema.
Cuantas más tentaciones tengas para hacer una tarea, más fácil será procrastinar. Mantén el móvil, las notificaciones y el acceso a internet desconectados cuando te dispongas a afrontar tareas complicadas.
Los modelos digitales traen consigo diferentes ventajas. Ya que es un modelo relativamente nuevo y el cual tuvo que generarse de emergencia debido a la situación global, pudo tener fallas en un inicio, pero ahora las universidades han tenido tiempo suficiente para organizar sus modelos.
Es por esto que los nuevos ciclos escolares contarán con mejores herramientas y modelos en línea mejor adaptados, ya que han aprendido de los errores iniciales y han tenido tiempo de innovar para perfeccionarlo.
Muchas personas están acostumbradas a los modelos presenciales y creen que un modelo digital será difícil de adaptar, pero la realidad es que si bien no es una transición sencilla puede traer diferentes beneficios que finalmente valdrán la pena.
Adaptarse al cambio es parte de la naturaleza humana, gracias a ello se aprenden nuevas habilidades y se adquieren nuevos talentos.
Por otro lado, los modelos digitales dan la oportunidad a quienes desean estudiar de hacerlo desde cualquier lado. Ya que no es necesario asistir de manera presencial a las clases, se puede acceder a programas de universidades fuera de tu ciudad o incluso de tu país.
Esto les da acceso a posibilidades infinitas, por un precio accesible. Ya que no tienen que trasladarse a vivir a el lugar que ofrece el programa, el límite lo pone el mismo estudiante interesado.
De igual forma de manera local, se ahorran trayectos de sus casas a la universidad en tiempo y dinero, lo cual resulta bastante atractivo para quienes no se encuentran cerca de la institución o quienes no cuentan con transporte propio para trasladarse.
Los modelos educativos cambian constantemente en su búsqueda de adaptarse a la rápida innovación tecnológica, la cual cada vez brinda más herramientas que pueden ser utilizadas para la mejora de los programas de educación.
Es por esto, que es el momento ideal para recurrir a un doctorado en educación. Las escuelas necesitan permanecer alerta a estos modelos cambiantes, de manera que puedan innovar a tiempo y contar con las mejores técnicas de educación.
A menudo escuelas e incluso universidades recurren a modelos educativos extranjeros que han tenido éxito en su país y buscan adaptarlos a su propio modelo. Esta práctica se ha realizado desde hace mucho tiempo y en general ha tenido una respuesta positiva.
Pero, ¿Por qué no mejor implementar un nuevo modelo educativo eficiente de manera original? Al conocer las tendencias actuales y los comportamientos de los estudiantes está opción se vuelve bastante factible.
Un doctorado en educación brinda todas las herramientas necesarias para lograr este objetivo con la finalidad de que sus egresados sean capaces de implementar nuevas estrategias de educación y subir el nivel académico de las universidades de las cuáles forman parte de manera importante.
Realizar un doctorado en educación en línea es una gran oportunidad para vivir la experiencia de un modelo educativo digital de primera mano lo cual puede ser de gran ayuda posteriormente al momento que el egresado requiera aplicar estas mismas técnicas e innovaciones en su propio modelo.
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