Ser médico es una de las profesiones más nobles y hermosas que se pueden ejercer hoy en día, pero implica mucho sacrificio y riesgos, como el descubrimiento de nuevas enfermedades y su exposición a las mismas o el momento doloroso de informar que alguien ha fallecido.
Actualmente vivimos una época complicada donde el acceso a la salud puede ser muy difícil para algunas personas, afortunadamente existen personas como tú que aún están apasionadas por realizar esta hermosa profesión, que no suficiente con ser médicos desean alcanzar nuevas metas y así ayudar a quien lo necesite, en este caso, los niños.
Si estás leyendo esto es porque ya tienes la intención de estudiar un posgrado con enfoque pediátrico pero es comprensible que tengas algunas dudas sobre si es la especialidad adecuada para ti, así que ¡hoy estás de suerte! llegaste al lugar correcto para informarte sobre los puntos a tomar en cuenta, al momento de tomar la decisión estudiar un posgrado con enfoque pediátrico.
¿Cómo saber si la Pediatría es para mí?
Tolerancia hacia los niños
Aunque parezca obvio uno de los principales y más importantes factores que debes tener en mente al tener la intención de estudiar una especialidad en pediatría es el nivel de tolerancia que tienes a lo que pueda hacer un niño.
Sabemos que su respuesta a muchas situaciones serán diferente a los adultos, haz una pausa para analizar si estas listo para estas situaciones, unas de las más comunes son:
- Berrinches
- Preguntas incomodas
- Mordidas
- Llanto
- Miedo
Recuerda siempre que los pequeños son extrovertidos, enérgicos y curiosos, es verdad que tendrás que enfrentarte a muchas situaciones complicadas pero también es cierto que trabajar con niños es de lo más tierno y divertido.
Puedes ayudarte de herramientas como disfraces, bromas inocentes y ropa colorida para crear una imagen amigable ante sus ojos y así hacer un poco más fácil el proceso para ellos y para ti.
Comunicación acorde a tu paciente
Muchas veces la comunicación con los adultos es difícil ahora imagina como lo es con un niño ¡todo un reto! por ello es importantísimo que escuches con atención a los pequeños, para así juntos llegar al diagnóstico correcto y posteriormente al tratamiento perfecto.
Empatía
Seguramente ya dominas esta cualidad a la perfección pero solo para recordártelo un poquito, hay que mencionar que tener empatía te será de gran utilidad para conectarte con tus pacientes y obtener mejores resultados.
Investigación constante
Diagnosticar y curar enfermedades pediátricas implica un mayor grado de dificultad ya que en ocasiones los niños no cuentan con las habilidades de comunicación necesarias para decir lo que les sucede, tienes que estar siempre atento a los síntomas y aspecto del niño, eso ayuda mucho.
Jornadas laborales amplias
Con los niños nada está escrito, puedes descuidarte solo un minuto y les pasan mil cosas es por ello que el trabajo de un pediatra nunca termina. Puede ocurrir una emergencia a media noche y no podrás dejar de atenderla, esta profesión implica compromiso que tú mismo sabes que tienes, ayudar y servir son valores que como médicos son parte de nuestro modo de vida.
Satisfacción diaria
Así como hay momentos amargos en esta profesión existen otros demasiado buenos, nada se compara a esa sensación de saber que pudiste ayudar a mejorar la situación de tú paciente y mejor aun cuando sabes que salvaste su vida, es simplemente incomparable.
Consultas médicas en cualquier lugar
Es importante que tú seas el primero en dignificar tu trabajo, 7 años de estudios más los que invertirán en el posgrado aunque hacemos esto por amor a la vida y la salud no tenemos porque reglar nuestro esfuerzo,no es egoísmo es darle su lugar a este oficio tan demandante. Esto no quiere decir que vas a cobrar en una emergencia en la calle, es simplemente no dejar que los demás abusen de tu buena voluntad.
Modelo de inspiración
Ser un profesional de la salud además de todo lo mencionado anteriormente implica ser un ejemplo a seguir como ciudadano, que si bien esto no nos hace perfectos ni quiere decir que no podamos cometer errores, pero a diferencia de otras carreras nuestros errores representan vidas perdidas y dañadas.
Por esto, debemos ser muy cuidadosos en cómo nos expresamos y compartimos en especial al ser pediatras ya que nuestros pacientes absorben toda la información que perciben del mundo y en base a eso pueden inspirarse para su futuro, así que sé siempre cordial y positivo no sabes si esa pequeña mano será un futuro colega.
Días para descansar y relajarte
Descansar es sumamente importante en esta profesión nuestro temple y cerebro además de las manos son nuestras principales herramientas de trabajo, mantener tu mente y cuerpo sanos es parte de ser buen médico. No olvides asistir regularmente con un colega a realizarte estudios, tu bienestar siempre debe ser lo más importante.
Esperamos que estos consejos te ayuden a decidir si la Pediatría es para ti, en la Universidad Justo Sierra estamos seguros de tu potencial y queremos explotarlo aún más. Dale un impulso a tu carrera profesional.
Universidad Justo Sierra ¡Educar para la vida!
